Culminó la primera etapa del proyecto Walk the rail que permitió realizar mejoras en el sendero que rodea la laguna aledaña al refugio Emilio Frey, en el cerro Catedral. La iniciativa ganó un concurso internacional y recibe financiación de la European Outdoor Conservation Association (EOCA.)
El proyecto fue elaborado por las ecólogas del Instituto de Biodiversidad y Medioambiente (Conicet, UNC) Mariana Chiuffo y Clara Pissolito, motivadas por la investigación de Agustina Barros, el asesoramiento de Santiago Romera y el apoyo de los encargados del refugio Frey. Contaron con la colaboración de la Cooperativa de Trabajo Senderos Patagonia (encargada de ejecutar las tareas), la Fundación Banco de Bosques, el INIBIOMA, CCT Patagonia Norte y Patagonia Films.
A lo largo del verano una docena de personas trabajó en el sendero, completando la nueva traza entre el refugio y la subida a la laguna Schmoll. Se acondiciono el sector sur de la laguna, lugar de acampe habitual de los visitantes durante décadas. Ello provocó una importante erosión, con tala de lengas, multiplicidad de senderos, fogones y lugares usados como baños. Hubo noches con más de 60 carpas y 200 personas acampando. Con los años el lugar comenzó a degradarse y Parques prohibió el acampe en 2017.
Un gran proyecto
La iniciativa de Pissolito, Chiuffo y Romera se presentó al concurso internacional en noviembre de 2020 y en abril de 2021 fue declarado ganador por la EOCA, que evaluó 250 proyectos de todo el mundo.
Los trabajos comenzaron en la primavera del 2021. La iniciativa contó con el amplio apoyo del Parque Nacional Nahuel Huapi, desde donde se gestionó el helicóptero para subir los materiales y el equipamiento.
La Cooperativa de Trabajo senderos Patagonia es liderada por Santiago Romero, Guillermo Lynch y Juanjo Puliafitto y la integran numerosos guías de montaña y montañeses con experiencia en el diseño de senderos y picadas: Federico Giraudo, Martín Muzzio, Nicolás Barrios, Tobías Barreira, Erik Karst, Esteban Olivieri Badessich, Francisco Vecelli, Rubén Velázquez y Lucas Zanetti. Varios de ellos trabajaron en la construcción de 100 kilómetros de senderos y 10 pequeños refugios en el Parque Nacional Perito Moreno, también con financiación internacional.
Las tareas se hicieron en equipo, por turnos, moviendo decenas de rocas y piedras, algunas de importante tamaño. De esta manera lograron trazar una senda que evita la erosión y el pisoteo del mallín. También clausuraron accesos laterales y lugares de acampe. Un trabajo muy eficiente y prolijo.
Mariana Chiuffo afirmó que “la primera etapa completó la nueva senda desde el refugio hasta su intersección con la picada a la laguna Schmoll. El próximo verano se mejorará el sendero por el sector norte de la laguna”. Explicó que “EOCA esta formada por un grupo de empresas de la industria europea de actividades al aire libre que se han unido para recaudar fondos y destinarlos a proyectos de conservación en todo el mundo. Nos otorgaron 29.800 euros, cuyo desembolso es en tres etapas”.
Recordó que “el objetivo es disminuir el impacto del uso recreativo intensivo sobre el mallín al oeste del refugio, modificando la senda existente y evitando que el tránsito humano genere erosión. El mallín al oeste del refugio tiene unas 18 hectáreas y es importante para la regulación hídrica, como reservorio de especies y en el almacenamiento y captura de carbono, por lo que contribuye a la mitigación del cambio climático”.
Una iniciativa muy importante, que debería replicarse en otros senderos de montaña del Parque Nacional, recorridos durante los veranos por miles de caminantes.