El bicentenario de la Compañía de Guías de Chamonix, (Francia), que se festeja durante 2021, sumó un inédito reconocimiento para los guías de montaña formados en Argentina, ya que uno de sus egresados fue admitido como socio en la agrupación más antigua y prestigiosa de guías de alta montaña (GAM) del mundo. Julián Casanova, oriundo de San Martín de los Andes, egresado como GAM UIAGM (Unión Internacional de Asociaciones de Guías de Montaña) en noviembre de 2010, fue uno de los 5 guías que ingresaron el 15 de agosto de 2021.
“Felicito a Julián! Integrar la Compagnie des Guides de Chamonix (CGCh) constituye un reconocimiento muy importante para nuestra profesión”, expuso Ramiro Calvo, director del curso donde egreso Casanova. Calvo, quien presidió la Asociación Argentina de Guías de Montaña (AAGM), dijo que la admisión “confirma que los cursos que se dictan en Argentina forman profesionales de excelencia”.
Julián, nacido en 1984, reside hace 8 años en un pueblo de montaña aledaño a Chamonix. Se casó con una francesa y tienen dos hijos, de 6 y 4 años. Trabaja en varias cordilleras del mundo y cada tanto viene a Argentina, donde realizó ascensos guiados a la cima del Fitz Roy.
Casanova afirmó que la admisión “constituye un excelente reconocimiento. Poder formar parte de la compañía más prestigiosa de guías de montaña del mundo es un honor. Solo hay que mirar el listado de socios, donde figuran los mejores guías de Francia”. Apellidos como Charlet y Ravanel se repiten durante generaciones y también fueron socios Lionel Terray, Louis Lachenal, Gastón Rebuffat y Christophe Profit, incluidos entre los alpinistas más importantes del mundo. “Es un reconocimiento a mi trabajo, a mi profesión y también confirma que en Argentina la formación para guía de alta montaña es muy exigente, muy completa”, dijo Julián.
Para ser admitido en la CGCh hay que ser guía de alta montaña UIAGM, tener la carta profesional francesa para trabajar, nacionalidad europea, estar registrado en Francia y pagar los impuestos franceses. También estar asociados al sindicato francés de guías de montaña y tener los seguros para trabajar en Los Alpes. Los nuevos miembros, muy pocos, son admitidos una vez por año. Cada postulante mantiene una entrevista personal, donde informa su forma de trabajar y su trayectoria deportiva y laboral. También hay que explicar los motivos por los cuales se desea ingresar y que acciones emprendería para el bien de la profesión en Chamonix.
La compañía funciona en formato cooperativo, esto es, se promueve la solidaridad entre sus integrantes. Genera trabajo para sus miembros y tiene un fondo especial para asistir a familiares de guías accidentados durante su trabajo, que se complementa a los seguros. La compañía, a diferencia de las agencias de viajes y turismo, promueve clientes para los guías, no para la compañía. Así, solo cobra la comisión la primera vez, Si el cliente vuelve, lo remiten directamente hacia el profesional.
En la actualidad la integran 160 guías UIAGM siendo Casanova el único Latinoamericano. También nuclea a guías de trekking, con título UIMLA, en la categoría “acompañantes de montaña”. Guían en ascensiones, escaladas y esquí de travesía. “Los guías de esta sociedad son muy demandados en Europa. Ser parte no solo me garantiza muy buenos trabajos, también continuidad laboral. Es un reconocimiento profesional para toda la vida”, explicó Casanova.